La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el brote de COVID-19 como pandemia mundial el pasado 11 de marzo, provocando un grave impacto en los viajes. A día de hoy se mantiene la recomendación de diferir los viajes no esenciales a lugares de riesgo extremo, en los que también se han restringido los viajes internos.
En cuanto a los destinos de alto riesgo, la OMS sugiere reconsiderar la necesidad de viajar y tener en cuenta las restricciones en cuanto a desplazamientos domésticos así como las interrupciones significativas en numerosos servicios. Por último, los destinos de riesgo medio implican algunas restricciones para viajar que también han de ser tenidas en cuenta.
España figura de momento entre los países de riesgo extremo a la espera de actualizar el mapa en función de los resultados obtenidos con el confinamiento establecido el 14 de marzo. La consultora Riskline recuerda los anuncios realizados en los últimos días por algunos destinos, estableciendo mediados de mayo como una fecha orientativa de levantamiento de las restricciones:
Australia: las restricciones de movimiento actuales en el país estarán vigentes al menos hasta mediados de mayo.
India: extiende un bloqueo nacional hasta al menos el 3 de mayo.
Israel: el 12 de abril se retomó la actividad en los transportes públicos pero los vuelos internacionales seguirán suspendidos hasta nuevo aviso.
Francia: anunció que su bloqueo continuaría hasta el 11 de mayo.