El coste de los eventos y el business travel se incrementó más de lo esperado en 2022 y continuará creciendo, aunque en menor medida, en lo que queda de año y en 2024, según la previsión de PWC y GBTA (la Asociación Global de los Viajes de Negocios, por sus siglas en inglés). Su informe 2024 Global Business Travel Forecast atribuye el aumento de lo que llama “el nuevo coste real de los viajes” a la combinación de una fuerte demanda y factores como la subida del precio del combustible, carencias de personal y problemas en la cadena de suministro.
La recuperación de los eventos y reuniones presenciales fue más sólida de lo que muchos habían previsto, según CWT, debido a la dificultad de alcanzar objetivos como la adquisición de clientes o la consolidación de relaciones en un entorno virtual. También hay una gran demanda por viajes de incentivo para motivar y recompensar a la plantilla. La tendencia, que continuará en 2024, es hacia viajes cada vez más largos y más frecuentes, y con un coste medio por participante más elevado. Los eventos se organizan con menos antelación en la era postpandemia, pero el informe recomienda planificar a 12 meses vista para conseguir precios razonables.
En cuanto a los viajes de negocios, el precio medio de los vuelos se incrementó en un porcentaje récord del 72,2% en 2022, comparado con el año anterior y superando los niveles de 2019. La demanda de vuelos se ha recuperado, impulsada sobre todo por el sector vacacional, pero la capacidad aérea se ve limitada por falta de personal y problemas en la cadena de suministro. Se espera que las tarifas crezcan un 2,3% en el resto de este año, y un 1,8% en 2024. La región de EMEA (Europa, Oriente Medio y Africa) registró el mayor aumento de precios en el último año.
Las tarifas hoteleras también crecieron en 2022, una media del 29,8% comparado con 2021. Aunque la tasa de ocupación fue alta, el incremento de los costes de la energía, plantilla, alimentos y bebidas llevó a precios récord en ciudades como Londres, Miami (Estados Unidos) o Singapur. La falta de competencia de hoteles de nueva construcción hace que los existentes puedan mantener precios elevados, y se espera un nuevo aumento del 4,3% este año y del 3,6% en 2024. El mayor incremento se dio en Norteamérica, pero la elevada inflación en varios países latinoamericanos hizo que esta región viese también un aumento considerable en el precio medio diario de los hoteles: el 26,9% en 2022, y previsiones del 9,1% y 5,6% respectivamente para este año y el que viene.
La caída en la demanda de alquiler de automóviles durante la pandemia hizo que muchas empresas redujesen su flota. Problemas de suministro han dificultado la recuperación de esta oferta, llevando a precios más elevados. El coste medio del alquiler subió un 9,8% en 2022, y se espera que continúe creciendo este año (6,7%) y en 2024 (2,1%).