Los gobiernos se toman el sector MICE cada vez más en serio y aprecian sobre todo el legado que los eventos pueden dejar en los destinos, según el informe The Business of Events: Global Destination Report, elaborado por las agencias Davies Tanner y SFA Connect. El estudio analiza cómo ha cambiado la percepción de la industria y la inversión pública en eventos desde 2019.
Recoge las opiniones de más de 1.000 representantes de convention bureaux, DMOs (organización de gestión de destinos, por sus siglas en inglés) y otros profesionales encargados de la promoción y captación de eventos en todo el mundo, principalmente en Europa (75% de los encuestados). Más de la mitad (55%) afirma que reciben más apoyo de su gobierno local, regional o nacional, y solo el 7% cree que el departamento de eventos tiene menos consideración que en 2019.
No obstante, la mayor importancia que se le da al segmento no se refleja en un aumento de la inversión en eventos por parte de los gobiernos. Solo el 15% de los encuestados afirma que esta inversión es ahora mayor, mientras que en el 42% de los casos ha disminuido. Hay un claro descenso en el número de eventos internacionales patrocinados debido a la disrupción en la programación de congresos de asociaciones causada por la pandemia, que por ahora se ve compensado con un incremento de los eventos locales y nacionales.
El 95% de los encuestados considera el legado de los eventos importante (34%) o muy importante (61%) para los destinos, y más gobiernos empiezan a apoyar congresos alineados con sus políticas nacionales como una herramienta para mejorar tanto la sociedad como la economía. Principalmente invierten en acciones en los campos de la salud, la ciencia, las energías verdes y la tecnología.