La profesión del organizador de eventos es considerada una de las que mayor nivel de stress genera. Además el profesional de eventos debe ser un experto en muchos ámbitos ya que cada operación es un mundo y por lo general, el profesional trabaja con distintos tipos de clientes, marcas, productos y servicios. Pertenecer a una asociación como MPI, que ofrece herramientas para ampliar conocimientos, compartir y conectar con otros profesionales del sector, ayuda a afrontar mejor los retos a los que nos enfrentamos.
A la hora de organizar un evento tenemos que dominar varias materias muy importantes: el conocimiento del servicio / producto del cliente; los objetivos del evento; la medición de resultados; el tan aclamado retorno sobre la inversión, saber interpretar algoritmos, métricas, etc.
A la hora de celebrarlo, deben formar parte de nuestras habilidades la construcción de páginas web con integración de pasarela de pagos; la gestión de secretarías técnicas (inscripciones, viajes, alojamiento y actividades paralelas); gozar de conocimiento de cada venue al detalle; dominar lo relacionado con aspectos audiovisuales, de producción y montaje; desarrollar la creatividad necesaria para la imagen del evento, su marketing o branding; controlar la logística de transportes; gestionar los equipos en el momento del evento in situ; saber seleccionar menús y dietas especiales; respetar las normas de protocolo, etc.
Desde 1972 MPI brinda educación innovadora y relevante para que cada profesional disponga de estas habilidades, así como de oportunidades para establecer contactos e intercambios comerciales. También actúa como una voz destacada para la promoción y el crecimiento de la industria. Reúne a 60.000 profesionales, con casi 70 capítulos y clubes en más de 70 países. Ayudamos a los miembros para que produzcan experiencias que inspiren, eduquen y llenen de energía.
