Las autoridades del Aeropuerto Internacional Pekín Capital (BCIA, por sus siglas en inglés), el segundo con más tráfico del mundo y con más de 100 millones de pasajeros al año recorriendo sus instalaciones, anuncian la aplicación de una serie de medidas que hacen del aeródromo un espacio contactless.
En colaboración con SITA, todas las fases relacionadas con el viaje han sido automatizadas, permitiendo al pasajero transitar por todo el aeropuerto mediante el reconocimiento facial que permite desde el registro y entrega de equipaje hasta los controles de seguridad, aduanas y embarque. Para ello han sido instalados 600 puntos de control, 250 accesos automáticos, 80 quioscos para el registro de los viajeros y 30 estaciones de entrega de equipaje.
Esta nueva tecnología bautizada como SITA Smart Path que también está siendo utilizada en otros aeropuertos, permite según SITA gestionar el embarque en el avión de más de 400 pasajeros en 20 minutos.