British Airways pone a prueba el uso de robots autónomos dotados de inteligencia artificial en la Terminal 5 del aeropuerto de Londres-Heathrow para asistir a los 90.000 clientes que pasan por allí diariamente. Con el nombre de Bill, en honor al primer piloto de un vuelo comercial de la aerolínea, el nuevo robot puede llevar a cabo tareas sencillas, dejando así más tiempo libre a la plantilla de la aerolínea para resolver las consultas más complejas.
Los robots, diseñados por la compañía Botsandus, están programados para interactuar con los pasajeros en diferentes idiomas gracias a programas de traducción avanzados, y pueden responder a miles de preguntas, incluyendo información en tiempo real sobre los vuelos. Además, gracias al uso de geolocalización y sensores que le permiten hacer un rastreo constante de 360 grados, el robot puede moverse libremente por la terminal y escoltar a los pasajeros a lugares específicos como la zona de asistencia especial de la aerolínea.
La inversión de la compañía en nuevas tecnologías año en el último año incluyó también vehículos de equipaje sin conductor, máquinas automáticas de facturación y entrega de equipaje, y la dotación de sus agentes de servicio al cliente con iPads con apps especializadas para resolver las consultas de los pasajeros. Este nuevo servicio se extenderá gradualmente a la red mundial de la aerolínea.