La Asociación de Agencias de Incentivo (IDEMICE), que cuenta con 36 miembros en España, presentó una declaración de principios de sostenibilidad para los viajes de incentivo que pretende ser un decálogo de buenas prácticas en el sector. Ofrece asimismo soluciones para alcanzar un modelo de desarrollo turístico sostenible.
El documento destaca que los viajes de incentivo pueden tener un impacto positivo o negativo en el medioambiente y las comunidades locales, y defiende la necesidad de poner en marcha medidas para corregir, minimizar y compensar la presión en los destinos.
El decálogo ofrece recomendaciones en diez áreas clave para la organización de viajes de incentivo más sostenibles: contratación de medios de transporte, utilización de envases, contratación de alojamiento, servicios de restauración sostenibles, producción sostenible, derechos de los trabajadores, generación de impactos positivos en el entorno, respeto al patrimonio local, corresponsabilidad de los participantes y la necesidad de aplicar la sostenibilidad en la propia agencia.
Estos son los diez puntos destacados para hacer los viajes de incentivo más sostenibles:
- Contratación de medios de transportes: Promover y priorizar la contratación de empresas de transporte aéreo, marítimo o terrestre que empleen combustibles sostenibles o vehículos eléctricos, así como aquellas que compensen las emisiones de carbono de sus actividades y/o hayan implantado y certificado sistemas de gestión medioambiental y estrategias de responsabilidad social corporativa.
- Lucha contra la contaminación de envases de un solo uso: Redoblar los esfuerzos por diseñar e implementar sistemas de avituallamiento e hidratación que eviten el consumo de envases de un solo uso y la consiguiente generación de residuos, y extender esta preocupación a los hoteles y proveedores contratados.
- Contratación de alojamientos: Tener en cuenta la eficiencia energética, minimización y gestión de residuos, el ahorro de agua o el empleo de productos locales para restauración a la hora de contratar los alojamientos para un viaje de incentivo. Se potenciará también el respeto del entorno y la promoción de oportunidades de empleo local, entre otros.
- Servicios de restauración más sostenible: Confeccionar propuestas de comidas más sostenibles para los clientes, intentando promover menús basados en alimentación saludable, con productos locales y de temporada y alimentos con baja huella ecológica. Asimismo, se han de contemplar los diversos hábitos alimenticios de los participantes y tener un consumo racional para evitar que haya desperdicio de comida.
- Producción sostenible: Intentar aplicar la economía circular y la eficiencia energética, reutilizando materiales, empleando materiales reutilizables o con bajo impacto medioambiental o adquiriendo los regalos para los asistentes de empresas o artesanos locales, en particular aquellos que promuevan la inclusión laboral de colectivos vulnerables.
- Derechos de los trabajadores: Fomentar el empleo de calidad y la reducción de las desigualdades, observando que los proveedores cuenten con buenas prácticas respecto a sus trabajadores, como el compromiso con la equidad salarial, políticas de igualdad de oportunidades, el respeto de sus derechos, el cuidado de su seguridad y salud, la inclusión laboral de colectivos vulnerables y el rechazo de la explotación infantil.
- Generación de impactos positivos en el entorno: Tratar de maximizar el impacto positivo de los viajes de incentivo mediante actividades de teambuilding responsable o la colaboración con proyectos de desarrollos social o ambiental del destino, fomentando la interacción de los participantes con las comunidades locales. Se priorizarán actividades que se puedan continuar en viajes posteriores y generen vínculos permanentes.
- Respeto del patrimonio local de los destinos: Fomentar el enriquecimiento que supone la interacción de los participantes con el patrimonio de un destino, incluyendo sus recursos naturales, costumbres, historia, gastronomía, monumentos y riqueza cultural, siempre desde el respeto estricto del mismo y evitando generar molestias a la población local.
- Corresponabilidad de los participantes y puesta en valor de la sostenibilidad: Buscar la implicación y el apoyo de los participantes en el viaje en las estrategias de sostenibilidad, informándoles y sensibilizándoles de las medidas puestas en marcha con el objetivo de fomentar cambios en sus hábitos y poner en valor el carácter más sostenible del evento.
- Responsabilidad en “nuestra casa”: El compromiso sostenible de la agencia ha de ir más allá de la organización de sus viajes y aplicarse también a todos los ámbitos de sus actividades, en especial en lo referente a la sostenibilidad de sus oficinas, la formación y concienciación de sus empleados, y la promoción de los puntos destacados en el decálogo en sus ámbitos de influencia, siendo un ejemplo para proveedores y clientes.