Los viajes de incentivo se recuperan progresivamente, con un mayor interés por nuevos destinos, y adquieren una mayor importancia estratégica dentro de las empresas como herramienta para la retención de talento y la consolidación de la cultura corporativa. Son algunos de los puntos destacados del 2022 Incentive Travel Index presentado por SITE (Sociedad para la Excelencia en los Viajes de Incentivo, por sus siglas en inglés) en el Smart Monday previo al salón IMEX America que tuvo lugar del 11 al 13 de octubre en Las Vegas (Estados Unidos).
La recuperación de los viajes de recompensa avanza más rápido en Norteamérica (incluyendo Estados Unidos, Canadá y México en el estudio), donde el 67% de los encuestados afirma haber retomado estos programas, frente a solo el 50% que declara estar de nuevo organizando viajes de incentivo en el resto del mundo. Para el 80% de los encuestados, el incremento de los costes y la inflación suponen los principales retos a los que se enfrentan en estos momentos. Aunque en general se buscan destinos más cercanos al lugar origen de los grupos, existe un mayor interés por explorar lugares nuevos que no se hayan incluido previamente en los programas. Así lo considera el 66% de los encuestados en Norteamérica y el 62% en el resto del mundo.
Con la proliferación del teletrabajo y las plantillas dispersas por todo el mundo, los viajes de incentivo adquieren mayor importancia ante la necesidad de estimular la conexión entre los representantes de la empresa y mejorar las relaciones entre colegas, según el 91% de los encuestados. El 67% afirma que es del mismo modo una herramienta de gran importancia para la retención de talento. Figuran entre otros de los beneficios destacados por los contratantes el engagement con respecto a la marca y el refuerzo de la cultura corporativa. Ambos se consideran más importantes (para el 66% de los encuestados) que otros como el retorno en la inversión y el incremento de las ventas (defendido por el 50%).