La sostenibilidad dentro de los eventos es un concepto que cada vez está más a la orden del día. Sin embargo, dentro del sector de los incentivos llevamos trabajando sobre ello desde hace más de 20 años, ya que siempre hemos tenido conciencia de nuestro impacto en los destinos y un alto grado de responsabilidad en nuestras actuaciones. Y no solo reduciendo los impactos negativos, sino aportando beneficios con las visitas de nuestros grupos contribuyendo al desarrollo de los destinos a los que hemos viajado, la mayoría de ellos en entornos subdesarrollados.
Así, comenzamos a desarrollar acciones solidarias allá por el año 2000. Más tarde dimos un paso adelante con acciones de protección medioambiental en entornos naturales en peligro.
Nos dimos cuenta que también podíamos dejar un buen legado ayudando en la recuperación o protección del patrimonio cultural en deterioro en lugares donde no tenían recursos para ello o ayudando a colectivos de artistas de diferentes partes del mundo para que consiguieran tener un sustento conservando sus tradiciones.
Este tipo de acciones también las hemos desarrollado en el ámbito nacional: además de cuidar el aspecto medioambiental, no dejamos de proyectar acciones como las incluidas en los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) 2030. En este sentido tenemos un compromiso muy especial con el desarrollo de una economía circular en poblaciones más rurales, trabajando con productos locales con denominación de origen, tanto de producción ecológica tradicional como de elaboración artesanal.
También nos sentimos comprometidos con el impulso de artistas locales y tradiciones que hagan vivir a nuestros clientes de incentivos una experiencia más inmersiva, auténtica y saludable, contribuyendo finalmente a la concienciación sobre la importancia de proteger, apreciar y contribuir al desarrollo de los lugares donde trabajemos, no solo no siendo perjudiciales sino dejando una trayectoria de mejora futura.