Adoptar una cultura de engagement es imprescindible para motivar a los trabajadores y conseguir que se sientan comprometidos con la empresa, sobre todo ahora que muchos empiezan a regresar a la oficina tras meses de teletrabajo. Así lo afirma Rudolf Rannegger, director general adjunto de MCI Spain & Portugal. El departamento de Recursos Humanos debe diseñar actividades de engagement creativas que funcionen tanto en el ámbito virtual e híbrido como el presencial.
La necesidad de trabajar remotamente durante la pandemia, lejos del ambiente de la oficina, ha provocado, mayoritariamente, que la socialización y motivación de las plantillas disminuya notablemente. Ahora se identifican tres tipos diferentes de trabajadores: aquellos que desean volver a la oficina a tiempo completo porque han echado de menos las relaciones sociales; los que se han sentido cómodos con el teletrabajo y no ven la necesidad de volver presencialmente, y un tercer grupo que prefiere la flexibilidad del trabajo híbrido. Las empresas necesitan invertir más que nunca en la salud mental y emocional de su plantilla, buscar la implicación y estimulación de todos ellos.
Según MCI, la clave para desarrollar campañas de engagement de éxito es la integración de creatividad, innovación y tecnología, adaptándose a las necesidades y a las áreas del trabajo que se pretende mejorar, pensando tanto en los representantes a nivel individual como en los equipos. Para conseguir una plantilla comprometida y motivada, no solo se deben programar actividades de socialización, sino que hay que ganarse la confianza del empleado mediante una comunicación transparente y sincera. Esto es igual de importante que el reconocimiento de sus logros profesionales.