Según la Secretaría de Turismo de México, la industria MICE en el país alcanzó en 2023 los niveles previos a la pandemia, aportando casi 120.000 millones de pesos a su economía y representando casi el 1,63% del PIB.
Se celebraron más de 300.000 eventos, un 11% más que en 2022, y se generaron 900.000 empleos directos e indirectos. También cabe destacar que los asistentes a este tipo de encuentros se quedan después de los mismos una media de 1,94 noches adicionales para disfrutar del destino.
Durante las operaciones corporativas y asociativas, que atraen a un público con mayor poder adquisitivo, los participantes se gastan un 94% más de media que un turista común, según un comunicado de la agencia de eventos RX México. Por ejemplo, una conferencia con 2.000 asistentes puede inyectar alrededor de 1 millón de dólares en la economía local.
Tanto las autoridades nacionales como RX estiman que 2024 será igualmente positivo y se superarán estas cifras.
En su comunicado, RX también destaca que los beneficiarios del aporte económico de la industria MICE no son solo los organizadores y expositores, sino también empresas locales como restaurantes, hoteles, centros comerciales, tiendas…; gobiernos locales y empresas de empleo temporal –de seguridad, limpieza, atención al cliente…–. Asimismo, destaca que estas actividades también fomentan el desarrollo social y cultural.
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