La conectividad aérea está siendo un factor clave en el buen funcionamiento de Argentina como destino MICE. Con las nuevas frecuencias que se han ido añadiendo en los últimos meses, Buenos Aires agrega 900.000 asientos al año en rutas aéreas procedentes de diversos destinos internacionales. Entre las nuevas conexiones destacan los cinco vuelos semanales desde Barcelona operados por Level que se suman a los tres desde Madrid con Iberia; cuatro desde Londres con Norwegian; tres desde Toronto con Air Canadá; cinco desde Adis Abeba con Ethiopian Airlines, uno desde Ámsterdam con KLM; uno desde Santiago de Chile con la misma compañóa y dos desde Zúrich con Edelweiss Air / Lufthansa. A partir de diciembre la red de enlaces aéreos se completará con tres vuelos semanales desde Los Ángeles operados por American Airlines.
En el primer semestre del año, 229.495 turistas visitaron Buenos Aires por motivos profesionales, lo que representa un 22% del total de turistas y supera a la cantidad registrada en 2017 durante este mismo periodo. La estancia media se sitúa en siete noches, con un gasto medio diario de aproximadamente 140 euros por delegado.
En 2017, el turismo de negocios había crecido un 18% en comparación con el año anterior. Según el ranking que elabora la International Congress and Convention Association (ICCA), Buenos Aires fue la ciudad de América que más eventos internacionales alojó y la 11ª del mundo, obteniendo su mejor posición histórica. En 2018 la ciudad albergó eventos de talla mundial como la Cumbre del G-20, los Juegos Olímpicos de la Juventud y el Global Summit de la World Travel & Tourism Council (WTTC).