Por Purificación Álamo
Las dos senadoras demócratas de Estados Unidos, Tammy Duckworth y Tammy Baldwin, quieren frenar la costumbre extendida de las compañías aéreas del país de reducir el espacio asignado a los pasajeros en la cabina de los aviones para rentabilizar más los vuelos. Han presentado varias propuestas para que se modifique la Ley de Desalojo de Emergencia de la Cabina de Pasajeros (EVAC, por sus siglas en inglés) y se mejoren los estándares de evacuación y el confort de los viajeros.
La nueva norma obligaría a las compañías aéreas americanas a rediseñar las cabinas para destinar más espacio a los pasajeros, lo que implicaría la reducción del número de asientos.
Menos espacio entre los asientos de las aeronaves estadounidenses
Desde 2011, la distancia entre el respaldo de un asiento y el siguiente se ha reducido más de 10 centímetros en las cabinas de los aviones de las compañías aéreas americanas, especialmente en la clase turista, y ha pasado de 89 a 78,7 cm, según un grupo estadounidense defensor de los derechos de los pasajeros. Pero el espacio entre filas es más pequeño en el caso de compañía de bajo coste, como Spirit Airlines, porque es de solo 71,1 cm.
Simulacros de evacuación de aviones ficticios
Según la Administración Federal de Aviación (FAA), en caso de emergencia hay que evacuar la aeronave en 90 segundos, independientemente de la edad o condición física de los pasajeros. En este sentido, las dos políticas demócratas critican que los simulacros de control realizados en 2019 y 2020 por la FAA fueron poco realistas. Se llevaron a cabo con grupos de 60 adultos de menos de 60 años, un pasaje muy irreal y una ocupación muy baja si se tiene en cuenta que un Boeing 737 MAX 8 puede acomodar entre 162 y 178 personas.
Más seguridad y más comodidad en los aviones de EE.UU.
Tammy Duckworth y Tammy Baldwin insisten en que deben evaluarse los estándares de las condiciones reales pues en un avión viajan a diarios personas de distinta edad, incluso personas mayores y niños, y de distintas capacidades, pero además los pasajeros pueden no hablar inglés, llevar equipaje de mano u objetos personales, que pueden ser gran obstáculo durante la evacuación de la aeronave, etc.
También ponen el foco en los cambios de complexión física de los estadounidenses, que son cada vez más altos y con más peso, y quieren que el proyecto de ley tenga en cuenta las condiciones reales de los pasajeros estadounidenses para garantizar la seguridad en todos los vuelos. “Nuestro proyecto considera circunstancias realistas como equipaje pesado y pasajeros de diferentes edades, tamaños y habilidades al verificar si los planes de evacuación y seguridad son efectivos”, destaca la senadora Tammy Baldwin.
Desde finales de los años 80, el hombre medio de más de 20 años ha engordado unos siete kilos y su cintura se ha ensanchado más de cinco centímetros. Por su parte, el peso de la mujer estadounidense media de más de 20 años ha aumentado unos 7,2 kg y su cintura es ahora 7,5 cm más ancha.
Factores claves para volar seguros
Las dos senadoras demócratas solicitan que se realice un estudio integral y se constituya un comité de expertos con todas las partes interesadas y representantes de los distintos colectivos, como discapacitados y mayores, e incluso se cuente con la opinión de pediatras. Además, quieren que la Ley de Desalojo de Emergencia de la Cabina de Pasajeros tenga en cuenta los siguientes factores:
- La edad de los pasajeros, incluidos niños pequeños y ancianos.
- El peso y la altura de las personas.
- Las distintas capacidades: movilidad, visual… incluso si pueden expresarse verbalmente.
- Si el pasajero habla inglés o no.
- La presencia de equipaje de mano y objetos personales.
- El tamaño y la inclinación de los asientos.
- La configuración y ubicación de los asientos, así como otros obstáculos que se puede encontrar el pasaje cuando se dirige a la salida del avión.