Muchas ciudades y pueblos españoles no explotan al máximo el potencial del turismo MICE como generador de riqueza, según la Agencia de Eventos Españolas Asociadas (AEVEA). La industria de eventos de empresa mueve alrededor de 7000 millones de euros al año, pero su poder de dinamización económica se resiente por la falta de políticas de promoción y organización de muchas administraciones públicas.

Por ejemplo, el turismo MICE en Barcelona genera 1500 millones de euros anuales, según un reciente informe de Turisme de Barcelona. Además, moviliza directamente a otros sectores como el hotelero, nuevas tecnologías o restauración, y contribuye a la desestacionalización. Muchos profesionales del ámbito internacional que conocen el destino a través de eventos regresan como turistas a nivel particular, sin coste de captación para las ciudades.

El Spain Convention Bureau destaca que en 2015 cerca de cuatro millones de personas asistieron a las 22.000 reuniones que se celebraron en España, lo que supuso un 15% más que en 2014.